verso libre, soneto, madrigal y rimas

tu eres el hombre - verso libre

mira al cielo,
la noche cobija negritud y agita los astros
todo lo que ves, que llamamos universo
no significa mucho más que eso, algo nombrable
.
tú, en cambio, eres un conjunto de virtudes,
tantas, que sería inoportuno hacer recuento
eres tan misterioso como milagroso
con el poder de interpretar tu alrededor
observarlo, maravillarte y hasta modificarlo
.
no conforme con ello,
construyes pensamientos que van más allá
del umbral de la vida ¿y para qué?
en la pretensión alquimista pseudoconstructiva
creas universos útiles y hasta un dios que lo habita
.
no ves, mejor dicho, no quieres ver
que el universo eres tú, el dios eres tú,
capaz de concebir el poder de la reflexión
que puedes allanar una civilización con otra
volverte en tu salvación o en tu exterminio
.
tú, eres el hombre
eres patria, nación, mundo, universo
producto de la confluencia de muchas oportunidades
de vida
estás aquí y ahora
para edificar tu propia felicidad
¿porqué no lo haces?
.

frustración poética - soneto

ese día un poeta con hambruna
maldecía el verso que sin fama
ni el juglar ni el libro le declama
pues murió cual un niño en su cuna
.
repetía "no tengo cosa alguna"
cual no correspondido el que ama
sueña con soledad en propia cama
al amor y al dolor junta y consuna
.
muere con olvidados de la vida
va a la nada por senda misteriosa
porque sin proponerse ser suicida
.
la fama que buscaba es mariposa
que a poco de nacer, casi enseguida
muere sola, oculta y silenciosa
.

morir en el deseo - madrigal

hay un deseo viviendo en mí
deseo lisonjero
el que al desearlo sufro y muero
.
hay un deseo muriendo en mí
por estar entre amor y desamor
pero yo lo deseo con ardor
con loco frenesí
tanto que al cielo promesa di
que si da lo que quiero
cumplido mi deseo, igual me muero
.
 

tacatá - rimas

mi amanecer no fue sino, tormenta,
con descampados, sol y resplandores;
en mi alma se quedaron muchos vientos
que faltaron en muchos corazones
.
hoy soy atardecer y pensamiento,
me pierdo las auroras y en mi ocaso
se arrebola mi sangre en las riberas
donde el tiempo es río de los años
.
a cada paso un sueño de un sueño,
que como el camino inacabado
siempre ofrece un más allá cercano
sin importar si aprietan tus zapatos
.