¡nunca hallarás morada peregrino!
los caminos a pie tú los batallas,
colinas y montañas son murallas;
sin bridas y sin frenos es tu sino
.
da agua el río, da sombra el pino,
para oir a los pájaros te callas,
tu rastro deja dos huellas lacayas
que van detrás del amo del destino
.
habrá un horizonte al oriente
o al sur, esperando tu ventura,
¡no hay nadie que llore tu presente!
.
sin rumbo de amor ni sepultura,
tu rumbo es un rumbo solamente
y la soledad viaja
silenciosa y ceñida a tu figura
.
los caminos a pie tú los batallas,
colinas y montañas son murallas;
sin bridas y sin frenos es tu sino
.
da agua el río, da sombra el pino,
para oir a los pájaros te callas,
tu rastro deja dos huellas lacayas
que van detrás del amo del destino
.
habrá un horizonte al oriente
o al sur, esperando tu ventura,
¡no hay nadie que llore tu presente!
.
sin rumbo de amor ni sepultura,
tu rumbo es un rumbo solamente
y la soledad viaja
silenciosa y ceñida a tu figura
.
Bonitos versos con un final previsible.
ResponderEliminarUn abrazo.
uy hermoso y te invita ala reflexión
ResponderEliminarSiento tus versos muy profundos, llenos de una inmensa tristeza por la certeza de que los caminos llegan siempre a un único lugar. Bueno, eso es lo que siento.
ResponderEliminarUn saludo cordial.
Lo importante es el camino, no llegar.
ResponderEliminarun abrazo
Eso es, en el fondo, la vida.
ResponderEliminarOmar, tu soneto es muy bueno en forma y fondo...Quizá un poco duro y desalentador...A veces la vida es así y nos hace fuertes...Sin embargo, espero que todos los peregrinos encuentren morada para descansar y alguien que les dedique unas palabras de afecto.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo de luz.
M.Jesús
Muy bueno ! Abrazos !!!!!
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